sábado 24 de noviembre de 2007
Buena reacción de los jóvenes
Me preocupan mucho las noticias en relación con los enfrentamientos entre grupos radicales de jóvenes. Aún más el herido del otro día en Cáceres. Me enorgullece la reacción de la mayoría de los jóvenes y de sus organizaciones juveniles. Han estado a la altura. Pero me gustaría que reflexionemos un poco sobre todo esto. Dadme vuestra visión. Si tenéis información también. No es un tema que se pueda despachar con comentarios superficiales. Cuidado con este fenómeno.PD., Anotaciones a este comentario: Escalonados desde la falta de derechos del valón en el futuro Flandes, hasta la Revolución Francesa, pasando por los de los indígenas en los países colonizados; los derechos en el Antiguo Régimen, de los siervos de la Edad Media, de los esclavos, de las bandas andriarcales en la Prehistoria, etc...
Para aprender a distinguir el nacionalismo de la democracia.
Comentario completo de esta profesora de historia:
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Hola Guillermo:
A mi también me preocupa mucho la radicalización de las ideas y mucho más en los jóvenes, como a ti. ¿Qué hemos hecho mal nuestra generación? ¿Cómo estamos llegando a estos puntos de violencia? Hace tiempo en un seminario de historia que hice con una catedrática catalana, descubrí algo interesante. Ella en su tesis demostró que el brote europeo de racismo y de ideologías nacionalistas era debido a que los jóvenes no llegaban nunca a estudiar bien la historia contemporánea más reciente, ya que los temarios que se nos imponen desde el ministerio son muy amplios y como siempre lógicamente empezamos por la prehistoria, no llegamos nunca a analizar nuestro pasado más cercano. Y ya se sabe, "el pueblo que no conoce su historia está condenado a repetirla". A mi me hizo pensar mucho y desde luego creo que es muy cierto lo que afirma, yo soy profesora de historia, como ya te habrás imaginado y creo firmemente que es muy importante que TODOS los chic@s conozcan muy bien todo aquello que hace muy poco nos llevó a tan grandes desastres. Yo sigo creyendo aún en que la educación es la llave para preparar bien las futuras generaciones, aunque amigo mío, a veces nos encontramos muy solos en este barco. Desde mi humilde colegio en tu pueblo que tú bien conoces, seguiré intentando inculcar en mis alumn@s el respeto a las ideas de los demás por encima de todo. Creo firmemente que es en educación donde los políticos no debeis escatimar ningún esfuerzo, es el futuro, son nuestros jóvenes y no nos gusta ver lo que vemos . Un abrazo y suerte en Bruselas
Sr. Presidente: una profesora de Historia (anónima) dijo en este blog el día 24:
“(…) Hace tiempo en un seminario de historia que hice con una catedrática catalana, descubrí algo interesante. Ella en su tesis demostró que el brote europeo de racismo y de ideologías nacionalistas era debido a que los jóvenes no llegaban nunca a estudiar bien la historia contemporánea más reciente, ya que los temarios que se nos imponen desde el ministerio son muy amplios y como siempre lógicamente empezamos por la prehistoria, no llegamos nunca a analizar nuestro pasado más cercano. Y ya se sabe, "el pueblo que no conoce su historia está condenado a repetirla". 24 de noviembre de 2007 20:49.
Me ha hecho recordar. En las escuelas de Austria de principios del siglo XX, el orden de las lecciones no era en sentido cronológico, de la Prehistoria al s. XX, sino al revés. Se empezaba en el siglo veinte, y se acababa en la Prehistoria. Le llamaban enseñanza a retro-tiempo. Porque al niño le es mas fácil partir de lo conocido, de su época, hacia lo lejano.
Para visualizar bien todas las etapas históricas (Edad Moderna, Media, Antigua, Prehistoria) sin que los alumnos se extraviaran, utilizaban unos cuadros en los que al lado de representaciones de figuras humanas de cada época, se colocaban, en fila, los utensilios que se usaban en su tiempo. Para el el s. XIX, motores de vapor, rifles. En la edad media, espadas, armaduras. En la Prehistoria, metales, cerámica, el fuego, etc., hasta llegar al momento en que el ser humano sólo tenía el lenguaje (la inteligencia).
Este método, útil para ver la evolución de la cultura material, también puede servir para plasmar nuestra lucha por la libertad, simbolizada en el paso de súbdito a ciudadano que se da en la Revolución Francesa. Basta un cuadro con los deberes de un “súbdito” del Antigua Régimen, al lado de otro con los derechos aportados por la Revolución a los “ciudadanos”.
Otros cuadros nos dejarían ver los derechos y deberes de cada tiempo: los de los alemanes durante la República de Weimar y con Hitler. Los de los blancos y los de los negros a principios del s. XX en EUA. Los derechos y deberes de los españoles durante la 2ª República y durante el franquismo. Los de los rusos antes y después de la caída del Muro de Berlín. Los derechos y deberes en la fenecida Yugoslavia, y hoy en Serbia o Croacia. Los deberes, en este momento, de los rusos en Estonia, Letonia y Lituania. O, haciendo política-ficción, los actuales derechos de los belgas, comparados con los futuros deberes de un valón en el futuro Flandes. Escalonados, a retro-tiempo. Para aprender a distinguir un ciudadano de un súbdito con los ojos cerrados.
Un saludo a todos